¿HAY APP PARA CHATEAR CON LOS MUERTOS?

No, no es ciencia ficción pero si un poco de imaginación, efectos especiales, inteligencia artificial y desarrollo informático.

Por: Jose Manuel García Bautista

En nuestro mundo del siglo XXI hay un buen número de «cosas» que se pueden hacer merced a la evolución de la tecnología y de la informática. Se puede estar viviendo un suceso, online, que se está produciendo en el otro lado del mundo, se puede crear una comunidad amigos que se acabe convirtiendo en una red social o una plataforma de vídeos que arrase e, incluso, sea competencia directa con la televisión. Eso y mucho más se puede hacer con nuestra tecnología pero lo más inquietante es lo que se plantea: hablar con los muertos.

No, no es ciencia ficción pero si un poco de imaginación, efectos especiales, inteligencia artificial y desarrollo informático. Esto puede ser posible ya gracias a los chatbots, es decir, aplicaciones que se pueden instalar en el teléfono móvil o en el ordenador y que pueden hacer, en diferentes entornos, que se tenga una conversación con una persona fallecida.

Chatbots

Así nos encontramos con chatbots cuyo campo de actuación ese este mismo, un entorno en el que se trabaja con bancos de datos e información que pueden hacer más llevadera la pérdida de un ser querido aunque todo ello implique un problema ético que es el de si la tecnología puede ayudar, mediante estos chatbots, a «resucitar» a estas personas de forma virtual y hacer más soportable el duelo o si este tipo de aplicación lo que hacen es alargar la pérdida y no ayudar a superarla pues es una forma de agarrarse a la «vida» en ese entorno de esa persona.

En ese sentido la doctora en Psicología e investigadora principal de un estudio al respecto de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y la Universidad de Aalborg, en Dinamarca, Belén Jiménez Alonso, decía que los griefsbots (denominación de este tipo de app en Estados Unidos) son una versión moderna de los rituales de duelo y sustituyen a mirar un álbum de fotos o al funeral: «Desde su punto de vista, los griefbots cumplirían una función psicológica positiva en el proceso del duelo, permitiendo a las personas interactuar de forma más sofisticada con el recuerdo de la persona fallecida, conmemorando su vida y contribuyendo, así, a mantener viva su memoria».

La tecnología puede ayudar a llevar mejor el duelo, como el caso de una mujer coreana (Corea del Sur) que gracias a la realidad virtual se pudo despedir de su hija de 7 años fallecida. La empresa recreó la imagen y voz de la niña y Jang Ji-Sung se pudo despedir de ella.

En función de ese vídeo y del sufrimiento de la madre no se vio positivo este tipo de desarrollo para sobrellevar la muerte de la persona pues, de alguna forma, para el doliente es como si estuviera viva cuando, realmente, ya ha muerto y causa más dolor.

A nivel psicológico no hay un criterio común, para unos puede ser bueno el poder superar ese dolor, ese duelo, de esa forma y para otros es una forma de provocar un mayor daño y prolongar algo que debe cerrarse superándolo como es la fase de duelo.

Más allá de la muerte

Los chatbots de personas que han muerto su parte de un futuro distópico, hoy día se avanza de forma rápida y hay apps que sustituyen a personas. Uno de estos desarrollos es el que hizo «Replika», una app que ofrece amigos virtuales fallecidos con los que poder hablar y que usa la inteligencia artificial para ese desarrollo conversacional.

Detrás de «Replika» está Eugenia Kuyda, de inteligencia artificial Luka, que diseñó el programa para poder hablar con su amigo, fallecido en 2015, Roman Mazurenko.

Eugenia recopiló todos los mensajes que tenía de Roman y los utilizó para crear un bot que imitara su forma de hablar y de pensar (con las limitaciones lógicas), obteniendo un chat en el que podía interactuar con esta parte digital del fallecido.

Según el experto Hossein Rahnama, un ser humano puede llegar a almacenar un billón de gigabytes en su vida con los que se puede crear una versión digital del mismo totalmente funcional con la que poder hablar y sostener conversaciones gracias a la inteligencia artificial. Los griefbots podrán «resucitar» muertos gracias a ese legado digital donde, obviamente, se debe garantizar el buen uso de toda esa información.

«With me», de ELROIS, sería otra app que trata de recrear conversaciones con un difunto merced a la información guardada del mismo (por ejemplo en Whastapp en los chats) o por otras vías. La inteligencia artificial se encarga de «hilar» las respuestas de forma que parezca lo más realista posible.

«Eterni.me» es otra de esas aplicaciones para conversar con los seres fallecidos como si estuviera haciéndolo con el gracias a la información de redes sociales, se crea un asistente virtual que simulará al finado. Los creadores indican: «podrás generar un Tú virtual, un avatar que emula tu personalidad y que pueda interactuar, y ofrecer información y consejos a tu familia y amigos después de fallecer».

Hay otras muchas app que hacen esta misma labor allá donde la persona debe evaluar si es sano para ella o no el usarlas, al fin y al cabo quién muere ya no está en el mundo de los vivos y esto es como si se tuviera una versión digital que la reemplazará sabiendo que está muerta. Jamás un chatbots o un griefbots podrá sustituir a la persona real aunque sea una forma de tener el recuerdo vivo de ese ser querido.